No fue suficiente el tiempo de confinamiento para hacer reparaciones locativas y dejar en optimas condiciones el centro educativo
Se trata del Institución Educativa Técnica Turística ‘Simón Bolívar’ de Puerto Colombia, donde el cuerpo de estudiantes de primaria y secundaria deben alternarse para asistir y recibir sus clases, no por precisamente por la pandemia del coronavirus, sino por el mal pésimo estado de sus aulas, en especial los techos y cielo raso que se vienen cayendo a pedazos y se convierten en todo un riesgo latente tanto para alumnos como docentes.
La institución cuenta con 22 salones, de las cuales 12 se encuentran inhabilitadas.
En estas condiciones, los estudiantes de primaria y bachillerato se vienen turnando para asistir al colegio a riesgo de ser víctimas de algún pedazos que caiga del techo, mientras tanto, quienes van a sus casas, aprovechan para adelantar los trabajos que son revisados el día siguiente, lo cual no era lo esperado por estudiantes y mucho menos los padres de familia, tras el retorno a clases después de un largo período de virtualidad.
Sobre esta situación, manifestó Marlene Daza, rectora de la Institución, “Un día vienen unos, otro día vienen otros. Las cubiertas están dañadas, al caerle la lluvia los cielos rasos se han venido abajo”.
Las pésimas condiciones del colegio ha desencadenado toda clase de críticas y protestas por parte de la comunidad académica que ven con preocupación el retraso académico de los menores y el deterioro de las instalaciones, cuyo monto para las reparaciones necesarias es cercana a los 700 millones de pesos.
Desde la administración de la Institución Educativa se indicó que la Secretaría de Educación revisarán el caso y promediando a mediados de año intervendrán las instalaciones.