Expertos atribuyen la baja como causa del fenómeno del cambio climático en el país, sumado a la pandemia que llevó a precios altos la materia prima, como también afectó la subida del dólar que o para en su ascenso que elevan aún más los costos de los insumos agropecuarios, lo que termina en la escasez de leche a nivel nacional, golpeando fuertemente la región Caribe con una disminución del 60% en su producción.
Por su parte, el sector de la industria lechera en Colombia afirma que, desde agosto pasado, la temporada invernal y la época de sequía que se alternan llevando al campo a condiciones extremas los tienen haciendo malabares para lograr precios que salvaguarden a los productores y que no sigan golpeando al consumidor final.
Se trata de “una operación circense” para lidiar con los precios al alza, como lo califica el presidente de Coolechera, Ricardo Feris, quien indica que actualmente a sus productores les están pagando hasta $1.850 pesos por el litro de leche cruda caliente.
“Por la leche fría estamos pagando un valor hasta de 2.300 pesos el litro. Eso nunca se había visto, pero si no es así la operación es inviable para cada una de las partes, es decir, esto no es un tema de capricho, sino de cálculo financiero que ha llevado a estos niveles”, explicó Feris.
“Por ende, finalmente esto afecta al productor, que no alcanza muchas veces a cubrir sus costos; a la industria, que no puede obtener las utilidades para seguir en una operación hacia arriba, sino en un punto de equilibrio, y se afecta también al consumidor, que tiene que pagar un poco más por su producto final, que es la leche“, agregó.
Para el consumidor final el litro de leche oscila entre 3.200 y 3.800 pesos. Los lecheros esperan mejorar la producción con la llegada de las lluvias que podrían favorecer las condiciones del campo.