El Colegio Médico de Antioquia se pronunció tras el fallo de la Corte Constitucional que despenalizó la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 24.
De acuerdo con Carlos Valdivieso, presidente de la asociación, la objeción de conciencia es válida para que los profesionales de la salud no lleven a cabo el procedimiento puesto que los médicos no estudiaron para ser verdugos.
“Nosotros los médicos no hemos estudiado medicina para servir de verdugos. Tiene que verse el punto de vista del médico. Los médicos no estudiamos para realizar este tipo de procedimientos y se requiere el respeto absoluto de la objeción de conciencia”, sostuvo Valdivieso..
“Si hay un embarazo menor, de bajo nivel de semanas, el ginecóloco tendrá que empuñar una cureta y realizar un procedimiento donde extrae el producto del embarazo, que es un ser vivo que va a terminar su vida en ese momento. En el caso de tratarse de un niño entre las 20 o un poco más de semanas, tendrán que suministrarle un medicamento que permita hacer un infarto en ese feto y después desembarazar la madre, que es el término que se usa, extraer ese feto que antes estaba vivo y como producto de la acción del médico, va a perder la vida y va a ser extraido”, indicó Valdivieso.
De acuerdo con el presidente del Colegio Médico de Antioquia, la objeción de conciencia se convierte en la única alternativa que tienen los profesionales de la salud para no llevar a cabo los procedimientos.
“La única salida que les queda a los médicos es objetar de forma individual y ese es un asuno muy importante que hay que tener en cuenta. Los médicos sabemos que la vida existe desde el momento de la concepción”, indicó Validivieso.