La elección de 16 representantes de las víctimas como congresistas en Colombia es una gran oportunidad para consolidar la implementación del acuerdo de paz con la desmovilizada guerrilla de las FARC, pero a la vez es un desafío por los riesgos de seguridad para los candidatos, dijo el jueves la ONU.
En los comicios de marzo próximo, los habitantes de 16 regiones golpeadas por la violencia podrán elegir a un representante a la cámara por cada zona, como parte del acuerdo de paz que firmaron en 2016 el Gobierno del expresidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Este punto para poner fin a un largo conflicto que ha dejado 260.000 muertos y millones de desplazados no se pudo cumplir en las elecciones de 2018, debido a que Congreso se abstuvo de aprobarlo.
Sin embargo, la Corte Constitucional revivió el año pasado las 16 circunscripciones con el objetivo de otorgar espacio en el Congreso a las víctimas del conflicto armado, después de una demanda.
«Es una gran oportunidad el que se esté materializando esas 16 curules, es muy importante para la implementación que (las víctimas) tengan una representación, que tengan voz en las instituciones democráticas colombianas», dijo en una conferencia de prensa el jefe de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, Carlos Ruiz Massieu.
Sin embargo, el funcionario de la ONU alertó sobre el riesgo que enfrentan los candidatos para hacer campaña en regiones con presencia de grupos armados ilegales, como las disidencias de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional y bandas criminales implicados en actividades ilícitas como el narcotráfico y la minería ilegal.
«Claramente, el hacer campaña en esas zonas complejas, complicadas, en las condiciones de seguridad que conocemos, pues es un riesgo», afirmó Ruiz quien solicitó al Gobierno garantizar protección a los candidatos y a los electores de esas regiones afectadas por la violencia.
En la mayoría de las zonas en las se que elegirán representantes de las víctimas se han registrado masacres de civiles, asesinatos de líderes sociales y de más de 300 de los 13.000 antiguos integrantes de las FARC que se reintegraron a la vida civil.
Los 16 representantes de las víctimas serán elegidos en los comicios legislativos de 2022 y 2026.
EFE